Desde hace unos años atrás, - específicamente
desde mayo del 2021-, cuando estaba el mundo en el auge de aquella nefasta y
planeada pandemia del covid y que decretó la emergencia sanitaria mundial, se
ha venido trabajando en la sede de la Organización Mundial de la Salud en
Ginebra, el acuerdo de Prevención, Preparación y Respuesta ante una Pandemia,
mejor conocido como Tratado de la OMS sobre Pandemias.
Se ha elaborado un documento borrador para
que los países miembros lo trabajen y le den la forma final a dicho documento.
Pero, este Tratado pandémico se ha venido denunciando por diferentes países
como una especie de “caramelo envenenado”, por lo que en realidad quieren estos
burócratas implementar o imponer en las naciones a nivel mundial. La firma de
este Tratado está para llevarse a cabo a finales de este mes de mayo y ya son
varios los países miembros que han manifestado que no firmarán dicho documento
ya que, lo que está detrás de dicho Tratado es, - como han denunciado -,
cederle a este organismo mundial la soberanía de los estados en materia de
salud.
Países que han manifestado su negativa a
firmar este Tratado son: Italia, que ha afirmado que, ante las muertes súbitas
provocadas por las vacunas del covid en el país europeo, la primera ministra Giorgia
Meloni, ha dicho que no lo firmará; el Reino Unido (Inglaterra) también ha
anunciado que no firmará el Tratado alegando que el mismo socaba su soberanía
en materia de salud y entregaría muchos recursos a otros países. Según el
borrador que se ha venido trabajando, este plantea que cada país miembro debe ceder
el 20% de los productos sanitarios relacionados con la pandemia a otros países
y se les impediría almacenar suministros. Esto incluiría terapias, enfermedades
pélvicas inflamatorias y vacunas. Tenemos que un grupo de diputados argentinos,
presentaron un proyecto de declaración para instar al gobierno a que no firme
ese Tratado, expresando “preocupación y rechazo ante la probable existencia de
una eventual suscripción a un acuerdo pandémico en el marco de la OMS, y ante
la modificación del reglamento sanitario internacional. Restringiendo y reemplazando
la soberanía de la República Argentina afectando no solamente la salud en un
sentido amplio, sino que, además atentaría contra la libertad y propiedad de
los ciudadanos de nuestro país”. El documento deja claro que es el estado
argentino quien ejerce sus potestades y atribuciones conferidos por la
constitución, a través de su gobierno federal.
Otro país que ha manifestado su negativa a
firmar este Tratado sobre pandemia es Estados Unidos de Norteamérica que, un
gran número de congresistas republicanos han instado al presidente Biden a que
no firme dicho Tratado por las mismas razones ya expuestas. Otros países que
han expresado su negativa o reserva para la firma son Rusia, China, Suiza,
Francia, España, Sudáfrica, Indonesia, Corea del Sur, Eslovaquia, Eslovenia,
Nueva Zelanda y otros.
Como nota trágica, a la hora
de escribir este artículo, se confirma la noticia de que, el día de ayer
(15/5), el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, sufrió un atentado
contra su vida, pero ya está fuera de peligro. Este ministro es cercano a Orban
y Trump, y había ordenado una investigación sobre la vacuna contra el covid en
su país. Dijo que “las vacunas han violado los derechos humanos de las personas,
y que la OMS no puede tener más poder”.
Como podemos ver, lo cierto es que, si estos países
han dado la voz de alarma para no firmar este Tratado pandémico, es porque algo
turbio se está manejando por debajo. Esto no lo podemos ver como algo fortuito
o simplemente como llevar la contraria. Es ya muy importante que países del
llamado primer mundo figuren entre los no firmantes.
Hablar de la OMS es mirar directamente hacia
la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La ONU hace tiempo que dejó de
ser fiel a lo que le dio origen el siglo pasado. La ONU es la sede de lo que se
ha llamado Gobierno Mundial, que ya tiene sus ministerios mundiales, como son:
el ministerio mundial de salud (OMS), ministerio mundial del trabajo (OIT),
ministerio mundial de desarrollo (PNUD), ministerio mundial de justicia (CPI),
ministerio mundial de agricultura (FAO), ministerio mundial del transporte
(OMT), ministerio mundial del comercio (OMC), ministerio mundial de educación,
ciencia y cultura (UNESCO), ministerio
mundial de la mujer (ONU-mujeres), ministerio mundial para la niñez (UNICEF),
etc. Y todos estos ministerios mundiales tienen sus respectivos satélite u ONGs
que están presentes en todo el mundo. Están también el Fondo Monetario Internacional,
Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo, etc. Estos son los que
prestan los dineros a los países para sus programas sociales y de desarrollo.
País que se niega a aceptar sus proposiciones, - que más bien son mandatos e
imposiciones -, pues no podrán acceder a estos préstamos onerosos, que es el
método de cómo mantienen a los países arrodillados.
ahora ¿qué implica para las naciones la
aprobación e implementación de este Tratado sobre Pandemia? ¿Qué dice su
contenido? Pues según el borrador que se viene trabajando, en materia de salud
implica para los estados miembros incluir el aborto como un derecho fundamental
de salud en sus documentos, incluida la guía de atención al aborto de 2022,
incluyéndolo como un servicio sanitario esencial en el Tratado; prevé el más
alto nivel posible de salud para todos los pueblos, sobre la base de la
equidad, derechos humanos y la solidaridad. Esto incluye el que los estados
miembros, según las directrices de la OMS, eliminen el derecho a la objeción de
conciencia del personal sanitario.
Por otro lado, el embajador enviado por
Biden, pidió, - que más bien hay que entenderlo como una exigencia -, que se
incluyera en el Tratado el acceso a los servicios sanitarios esenciales durante
las pandemias, incluidos los servicios de salud sexual y reproductiva, es
decir, el aborto. Y China ha pedido que se mantenga en secreto lo tratado en
las negociaciones sobre la pandemia, o sea, que estos documentos no sean de
acceso público.
Esto así, daría una mayor y casi total
autoridad al director de la OMS, para declarar una pandemia y activar, por
ende, los requisitos y disposiciones del Tratado sobre la soberanía de los
países miembros.
Como siempre, para confundir al enemigo, el Tratado
hace referencia a la soberanía de los estados. Pero el borrador contiene una
advertencia, que garantiza que la jurisdicción y el control nacionales de los
estados, no causen daños y lesiones a otros países. ¿Cómo se entiende esto?
Como daños que siguen sin especificarse, y que se puede interpretar de varias
maneras, incluyendo acciones consideradas discriminatorias, como prohibiciones
de aborto, cirugías para transexuales, etc.
Ahora, ¿qué implica la firma de este Tratado
sobre Pandemia para la República Dominicana? Nuestro país es estado miembro de
este organismo mundial. Pero, hasta el día de hoy, ni la prensa ni comunicadores
han hablado de este Tratado que se viene cocinando en la OMS. Salvo dos o tres
comunicadores en plataformas digitales han hablado de esto y lo han hecho en
una manera de advertirnos, tanto al gobierno central como al pueblo dominicano
en general, de que el gobierno dominicano no debe firmar dicho Tratado sobre
Pandemia ya que eso traería el entregar a la OMS la soberanía en materia de
salud.
La República Dominicana ha venido dando unas
señales en anteriores ocasiones, nada inocentes, de apoyar una serie de
políticas internacionales, emanadas de estos organismos, que ponen en
entredicho la soberanía del país a la hora de apoyar o no dichas resoluciones.
Es una especie de arrodillamiento ante estos organismos que, muy pocas cosas
positivas traen al país. Pareciera que a nuestras autoridades les da miedo
exponer sus puntos de vistas en esas discusiones que se dan en esos organismos;
que la representación del país sólo está en esas discusiones para apoyar lo que
se plantee en esas reuniones. Nuestro país ha fungido como una especie de sello
gomífrafo y eso no es bueno.
Recordemos que en la pasada pandemia del
covid, en nuestro país hubo la intención de algunos legisladores de aprobar la
vacunación obligatoria, violando así la constitución en su articulo 42, numeral
3. Las vacunas que se autorizaron por la OMS para el covid fueron vacunas
experimentales, y ya se han publicado las consecuencias de estas y todas las
demandas judiciales que se han venido sometiendo en los tribunales de otros países.
Pero aquí en RD no se dice nada de esto ni de las consecuencias negativas que
estas vacunas están provocando en gran parte de la población. Aquellos que se
la pasaron satanizando a los que no se vacunaron y pidiendo que se les
encerrara y no tuvieran acceso a bancos, centros comerciales, transporte, y
otros servicios públicos y privados, - médicos, políticos, comunicadores,
pastores -, hace tiempo que salieron de las redes sociales y no dicen nada para
exigir una investigación científica y judicial que dé respuestas a tantas
cuestiones.
Ante esta fecha que se acerca para la
aprobación de este Tratado sobre pandemia de la OMS, será una ocasión más para
ver qué decisión tomará el gobierno dominicano en las votaciones. Esperamos
que, como han manifestado otros países, la República Dominicana se abstenga de
firmar dicho Tratado, que es más bien una especie de dictadura sanitaria. Esta
es una prueba más para ver hasta dónde viene avanzando la incondicionalidad del
presidente a la ONU.